A un paso de la gloria. A un peldaño del objetivo anhelado desde hace largos años. Provincial tuvo otra actuación convincente basada en inteligencia y oficio para derrotar a Sportsmen como visitante por 92 a 69 y adelantarse 2 a 1 en la serie final de la Superliga rosarina de la mano de sus dos símbolos, los jugadores que marcan la diferencia a favor del Rojo, Adrián Boccia (23 puntos) y Pablo Fernández (23).

Ellos llevaron la voz de la ofensiva visitante, pero también asumieron una vez más presiones y responsabilidades en una final que viene caliente y que lamentablemente el jueves se cerró con tristes situaciones extradeportivas.

Más allá de que ambos propusieron defensas aguerridas, intensas y concentradas, fue Provincial quien edificó la ventaja inicial y, más allá de esporádicas reacciones del Verde, encontró la fórmula para sostener una diferencia promedio de 12 puntos en la que mucho tuvo que ver una defensa colectiva inteligente contra Boixader (igual hizo 21) y el permanente apremio a los tiradores locales.

El Rojo se mantuvo centrado en negar el juego de velocidad a Sportsmen y fue solvente en el aprovechamiento de espacios y emparejamientos favorables. Ettorre fue el complemento explosivo para los experimentados y la doble base de Reyero y Gerbaudo dio soluciones.

La diferencia fue creciendo hasta cruzar los 20 tantos y aunque parecía que la definición se encaminaba temprano en el juego, este luchador Sportsmen reaccionó hasta ponerse sólo a 6 en el inicio del cuarto definitorio.

Pero una vez más en los momentos complicados aparecieron Boccia y Fernández para mostrar todo su talento y personalidad, recuperar poco a poco la ventaja y redondear una victoria merecida que lo dejó a un triunfo del título local.

Después llegó lo repudiable. Lamentablemente una vez que finalizó el partido, tras los saludos, y cuando Provincial iba a sacarse las fotos del festejo, cayeron varias cosas desde la tribuna que originaron el lógico enojo de jugadores y allegados y hubo una serie de discusiones en el rectángulo que el juego no merecía. Minutos después, ya fuera de la cancha, sucedió lo mismo con los hinchas en una situación que la policía no supo ni pudo controlar (eran sólo seis) ni dentro ni fuera del club. Es que luego del final fue muy sencillo evitar la separación de los sectores de las parcialidades y eso trajo aparejado problemas en la salida y corridas.

Si bien en estos casos siempre habrá lugar para excusas y versiones encontradas, lo cierto es que el duelo apasionante por el título ya venía discutido y lamentablemente (aunque también previsiblemente) llegó al punto de cruzar el límite, por lo que será obligación de los clubes (sobre todo del que sea local), de la Rosarina y del control policial garantizar un trabajo conjunto en pos de que tanto el cuarto partido como en el caso de necesitar un quinto puedan llevarse a cabo en paz. Toda final debe ser con público y en calma. Para que ello suceda el compromiso debe ser de todos.

SÍNTESIS

SPORTSMEN 69: Diego Foradori 2, Martín Allende 11, Alejo Paoloni 4, Joaquín Cingolani 6, Nicolás Boixader 21 (fi), Augusto Torres 7, Joaquín Zapata 6, Santiago Escobar 2, Ignacio Tripelli 2, Francisco Buetto 2, Santiago Foradori 0, Manuel Calderón 6. DT: Cristian Le Bihan.

PROVINCIAL 92: Gastón Gerbaudo 6, Alejandro Ettorre 15, Pablo Fernández 23, Adrián Boccia 23, Juan Pablo Evangelista 9 (fi), Federico Pérez 6, Nicolás Reyero 4, Tomás Gómez 6, Facundo Rodríguez 0. DT: Gustavo Lalima

ESTADIO: Alfredo Figna

ÁRBITROS: Marcelo Pérez, Jeremías Miraglia y Jonathan Colman

PARCIALES: 17/25, 31/42 y 54/64

¿Cuándo sigue?

El cuarto partido de la serie final está pactado para este domingo a las 20.30 en el Afredo Figna. El quinto tiene fecha para el 8 de diciembre en el Salvador Bonilla.