Las lluvias que se registran desde el martes en la zona central del país están transformando por completo el panorama para el sector agropecuario, que hasta inicios de mes sufría una sequía que afectaba al trigo e impedía la siembra del maíz, dijo el miércoles la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
De acuerdo con un reporte de la BCR, en las últimas 24 horas cayeron entre 30 y 90 milímetros de agua en gran parte del núcleo agrícola de Argentina, el tercer exportador mundial de maíz y un proveedor global clave de trigo.
«Veníamos perdiendo 3 a 0 contra la sequía. Con las lluvias de la semana pasada nos pusimos 3 a 2 y con lo que está pasando ahora pasaríamos a ganar 4 a 3», dijo Cristian Russo, titular de estimaciones agrícolas de la BCR, según el informe de la Bolsa.
Para el trigo del ciclo 2023/24 las lluvias recientes son «cruciales» y se producen en sus últimas semanas de desarrollo de rendimientos, señaló la BCR, que a inicios de mes recortó su cálculo de cosecha para el cereal a 19,5 millones de toneladas por la falta de agua. La cosecha del grano comienza en noviembre.
En el caso del maíz de la temporada 2023/24, el agua permitirá a muchos agricultores retomar las tareas de implantación, mientras que con respecto a la soja, «comenzará a sembrarse con mayor intensidad en las próximas semanas, ahora con reservas hídricas alentadoras», dijo la Bolsa.
La Bolsa de Rosario prevé una cosecha de maíz de entre 51 y 52 millones de toneladas en el ciclo 2023/24 y una producción de soja de entre 52 y 53 millones de toneladas en la misma temporada. La siembra del cereal comenzó en septiembre y la de la oleaginosa en la segunda mitad de octubre.
Fuente: Radiofonica