A partir del 27 de enero de manera oficial el gobierno Nacional informó la baja en las alicuotas de los cereales y oleaginosas, logrando en general entre todos los productos una baja de alrededor del 20%.
A todo esto la reacción de los productores no fue de gran magnitud, de hecho si bien hubo un incremento de venta de cereales, no fue significativo en lo más mínimo.
Resta esperar por la próxima cosecha, que actualmente sufre por la gran sequía, y ver si teniendo en cuenta que esta baja en las retenciones sería solo hasta el 30 de junio, esto incentiva a qué se liquide de manera más rápida el ingreso de la cosecha para aprovechar esta mayor rentabilidad o se mantenga como hasta el momento sin mayor repercusión en el sector agropecuario.