Un estudio reciente de la Bolsa de Cereales de Córdoba estimó que allí el maíz continúa arrojando un mejor resultado económico que la soja, y que con el nuevo esquema de retenciones el cuadro se fortificó para la gramínea.
La situación se da, principalmente, por los precios esperados a cosecha: harían que el cereal exhiba “el mejor precio relativo respecto a la oleaginosa de los últimos diez años”.
El cambio que el Gobierno introdujo en materia de retenciones generó que el tributo pasara del 12% al 9,5%, mientras que la soja lo hizo desde un 33% al 26%. El movimiento generó subas en los precios a cosecha, un 4,3% para el maíz y un 4,6% para la soja.
“Además, en enero (mes donde generalmente se refertiliza), fueron necesarios 25,8 quintales de maíz para adquirir una tonelada de urea, mientras que, en enero del año previo eran necesarios 50 quintales”, precisaron.