“Es la jornada ganadera más característica de la Sociedad Rural”, definió Carlos Odriozola, coordinador de la Comisión de Carnes y consejero de la SRA durante la presentación de este encuentro realizado en el marco de La Rural 2024.
Y todo lo que se habló durante la mañana le dio la razón, con un amplio abanico de expertos que disertaron sobre los desafíos y oportunidades para el negocio de la carne vacuna en Argentina, tanto a nivel nacional como en su inserción internacional.
Uno de ellos fue José Lizzi, líder de la Comisión de Ganadería de CREA, quien resaltó: “La sensación que tenemos desde todo el sector es que el momento es hoy, por varias circunstancias: se ha llegado a un nivel de madurez social que se vio manifestado en un cambio de tendencia en las últimas elecciones, tenemos el apoyo del Gobierno y también tenemos las expectativas”.
“Lo que toca ahora, si las condiciones de la macroeconomía y de las políticas se van dando, es que como sector tomemos el liderazgo y proponer el camino. Lo que viene puede ser muy interesante, debiera ser así, para un país mejor”, agregó.
LOS DESAFÍOS DE LA CARNE VACUNA
Acerca de los desafíos para la ganadería argentina, citó la incrementación de la facturación total del sector, como punto de partida, instando a “vender más y mejor”.
Asimismo, mencionó la necesidad de traccionar mejoras en la cadena, incluyendo “más productividad con eficiencia de stock”, y con menor impacto ambiental.
Luego, durante el panel “Desafíos ante el nuevo panorama”, se analizaron tres temáticas particulares: El camino hacia una mayor inserción externa; Sanidad y estándar mínimo, y Certificación y trazabilidad.
Sobre la primera temática, Marcelo Regúnaga, ex secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca durante las presidencias de Carlos Menem y Fernando de la Rúa, apuntó que Argentina exporta muchos commodities, pero debe agregar más valor, poniendo como ejemplo lo que hace Estados Unidos.
“La primera transformación es producir más carne, pero la estructura productiva argentina está muy condicionada por los cambios de políticas y por las políticas anti agropecuarias. Eso repercutió más en la ganadería”, remarcó.
En este punto, Regúnaga reclamó “políticas de Estado para crecer a partir de una estrategia de inserción internacional”.
“Los productores ganaderos y todos los productores, si les generan incentivos, responden inmediatamente. Cuando el productor tiene condiciones es uno de los que más rápido se adapta y nuestra agricultura es la que tiene más respuestas a los incentivos económicos”, aseguró.
LA IMPORTANCIA DE LA SANIDAD
Por su parte, la temática “Sanidad y estándar mínimo” fue abordada por el médico veterinario Jorge Dillon, ex director Nacional de Sanidad Animal (Senasa) en el período 2005-2012, y ex subsecretario de Ganadería de la Nación (2013/2015).
El profesional, a partir de su larga trayectoria dentro de la función pública, comenzó por defender el estándar sanitario del país: “En lo que se refiere a sanidad animal podemos decir que Argentina goza de buena salud, no tiene las principales enfermedades que limitan el comercio mundial de carnes. Desde que somos libres de aftosa, con y sin vacunación en Patagonia, que no tenemos encefalopatía espongiforme , y otras tantas enfermedades de las cuales somos libres, estamos mejor posicionados para acceder a muchos mercados”.
De todas formas, reconoció que “tenemos una limitación porque seguimos vacunando (contra aftosa) y algunos países asiáticos, como Corea y Japón, todavía tienen ciertas restricciones y lo mismo otros mercados, y esa es una de las cuestiones que tenemos que plantearnos hacia futuro”.
Fuente: Infocampo